Jimena Lombardi
​About Me
Soy ciudadana argentina e italiana, y mi vida ha estado profundamente marcada por el encuentro de culturas. Viví varios años en el extranjero, donde me nutrí de diversas tradiciones, especialmente la celta. Desde muy pequeña, la música celta estuvo presente: cursé desde jardín hasta el secundario en un colegio irlandés, donde formé parte del coro y del cuerpo de danza irlandesa. Esa impronta dejó una huella que aún hoy vibra en mi camino artístico.
En 2009 incursioné en el jazz vocal, interpretando canciones en francés, inglés y español en el mítico Pasaje Bollini, bajo la guía de mi profesora de canto Ivana Berenstein. Fue una etapa que me permitió explorar el poder de la voz y la interpretación.
Un momento revelador ocurrió en noviembre de 2018, durante una visita al Museo del Inmigrante en Buenos Aires, junto a mi amigo Mariano. Allí, en una instalación artística, encontré un mensaje escondido en un cofre: “Todos somos uno. Todos somos música.” En ese instante no lo supe, pero ese mensaje sería una señal clara de lo que vendría.
En 2019, en una charla con mi amigo Antonio, surgió la pregunta que lo cambiaría todo: “¿Alguna vez pensaste en tocar un instrumento?”. Esa simple pregunta despertó algo profundo en mí. Poco después conocí al arpista colombiano Andrés Rozo, quien me inició en el arpa paraguaya, enseñándome piezas como “Sólo Luz” de Raúl Carnota y “El día que me quieras” de Gardel.
El llamado de la música celta y medieval se volvió cada vez más fuerte. En 2020 encargué un arpa gótica de 22 cuerdas al querido luthier Martín Gray (@luthierdelbosque, QEPD), quien junto a su esposa, la artista Florencia Burton, diseñó y pintó mi instrumento con un alma única. Ese mismo año conocí a mi actual maestra, Patricia Puricelli (@arpapuricelli), con quien profundicé mi conexión con el repertorio celta y medieval, que hoy forma parte esencial de mi expresión artística.
En agosto de 2021 viajé a Candonga, en la provincia de Córdoba. Allí sentí una profunda conexión con la energía sanadora del lugar y el misticismo de su capilla del siglo XVIII. Inspirada por esa vivencia, compuse “Capilla de Candonga”, una obra con aires de música sacra del 1700. Esta composición fue donada a la Agencia Córdoba Cultura y aceptada como parte del patrimonio cultural de la provincia en julio de 2022.
Desde entonces, he tenido la dicha de compartir la música celta en diversos espacios. He tocado en varias ocasiones en el COFA Palacio Balcarce, en el barrio de Retiro, gracias al apoyo del Brigadier Gustavo Lema, amante de la música de arpa. También he presentado el arpa celta a los alumnos del Jardín y del Colegio Santa Ana en Ciudad Evita, y participé en la inauguración de la Galería de Arte Bordeaux en Nordelta (@bordeauxartgallery), de la mano del artista Toni Ibañez (@yosoyeltoni).
